En el noroeste de Africa hay un pueblo que habla castellano, y por tanto, considera El Quijote como un patrimonio propio. Es un pueblo abandonado y traicionado por España, que sin embargo conserva y defiende con orgullo su cultura y su lengua. No se puede responder con mayor nobleza a tan indigno comportamiento.
Representantes de ese pueblo han estado en el Círculo de Bellas Artes, han leído fragmentos del Quijote y han reivindicado la creación de una sede del Instituto Cervantes en su país.

«Cuesta creer que en países lejanos sin apenas vinculación con España y su lengua esté presente el Instituto Cervantes y, sin embargo, no esté entre los saharauis, que llevamos 30 años enseñando español a nuestros hijos, que somos el único país árabe hispanohablante, porque el español es lengua cooficial junto con el árabe de la República Árabe Saharaui Democrática» (Mohamed Ali Ali Salem, representante de cultura del Frente Polisario)
Existe en internet un blog dedicado a la causa del pueblo saharaui: Poemario por un Sahara libre. Visítalo.