Libro de la Fundación Ingeniería y Sociedad.
La primera reimpresión del libro que contiene las ponencias del XII Curso de Verano de Ingeniería Civil, organizado por la Fundación Ingeniería y Sociedad en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha, es un buen motivo para comentarlo. Dice en el prólogo Miguel Aguiló, Presidente de la Fundación, que una de las razones para elegir como tema la Ingeniería Hispano Musulmana fue el clima antimusulmán creado en todo el mundo a raíz de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York, lo que demuestra que los organizadores del curso no son de los que nadan a favor de la corriente sino todo lo contrario.
Según el presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, Clemente Saénz Ridruejo: «El trasfondo y argumento de la ciudad islámica es el Corán y sus suras: la teología, la moral, las costumbres y hasta la dietética. En función de ello la mezquita -o mezquita mayor, si hay otras- ocupa una posición central, con los muecines llamando a la oración desde los alminares. En lugar destacado y defendedero estará la alcazaba, con su alcázar dominante y su albacara; de ella partirá la muralla que rodea la población. En la ciudad musulmana, las puertas de las cortinas juegan un papel de importancia porque hacen el efecto de lugares de reunión y además los aledaños de una de ellas servirán de zoco«.
Las 14 conferencias recogidas en el libro abarcan, además de las ciudades hispano-musulmanas, aspectos como las rutas y caminos de Al-Andalus, el paisaje y la jardinería, los riegos y sistemas hidráulicos y la ingeniería militar. Todas a cargo de prestigiosos expertos de diversas universidades.
Juan Guillamón Álvarez, al hablar de los «Sistemas hidráulicos en el Levante peninsular», dice: «En España, los árabes fueron pioneros en el desarrollo de buena parte del complejo entramado de acequias, acequietas, escorredores, landronas, meranchos y azarbes que hoy forman parte del regadío levantino. Tal sistema (…) siempre parte de un azud de retención en el río del que nace una acequia grande y madre de todas las demás, en una y otra margen del propio río. El agua siempre pasa de un canal a otro menor; después, mediante una inteligente ramificación llega a inundar los huertos, tras lo cual vuelve a través de landronas, meranchos y azarbes de nuevo al río«.
El curso se celebró en Toledo, del 8 al 15 de julio de 2002, y sus directores fueron los ingenieros de caminos Clemente Sáenz Ridruejo y Florentino Santos García.