La disputa del asno

Anselm de Turmeda, escritor mallorquín convertido al Islam

Se trasladó a Túnez, donde adopto el nombre de Abdallah al Tarchuman.

Anselm de Turmeda nació en Palma de Mallorca alrededor de 1355, probablemente en una rica familia de tejedores. De joven se trasladó a la península y tomó los hábitos en el convento de los franciscanos de Montblanc, donde recibió una buena formación y tuvo oportunidad de estudiar en Bolonia –allí residió varios años- París y Montpellier.

Cuando tenía poco más de treinta años, emprendió viaje a Mallorca, Sicilia y Túnez, en compañía de Fray Juan Marginet, un monje de Poblet, y la monja de Santa Clara Na Alienor. En Túnez, los tres religiosos decidieron convertirse al Islam y no regresar a Cataluña, aunque algún tiempo después, los dos compañeros de Turmeda se arrepentirían y volverían a su país.

Llibre Compost Per Fra Anselm Turmeda, edición de 1947.
Llibre Compost Per Fra Anselm Turmeda, edición de 1947.

Anselm de Turmeda adoptó el nombre de Abd Allah ibn Abd Allah al Tarchuman al Mayurqui al-Muhtad, donde Abd Allah quiere decir “siervo de Dios”, ibn Abd Allah, “hijo del siervo de Dios”; al Tarchuman significa el traductor; al Mayurqui, el mallorquín y al-Muhtad es “el que ha alcanzado la fe islamica”.

Turmeda trabajó de intérprete y traductor en la aduana, se ganó la confianza del sultán y poco después fue ascendido a alcaide de aduanas marítimas, un cargo de cierta importancia. Se casó con varias mujeres, ya que su nueva fe se lo permitía, y tuvo numerosos hijos. Sus antiguos compañeros cristianos dijeron que fue su afición a las mujeres lo que le llevó a apostatar. Ejerció de tesorero del sultán Abu al Abbas y de escudero e intendente de su sucesor Abu Faris.

Según las enciclopedias al uso:

“La literatura catalana -a la cual pertenece Fray Anselmo de Turmeda– se manifestó por primera vez en los sermones predicados en lengua vulgar, desde el siglo X. A mediados del siglo XII, con Berenguer de Palol (1136–1170) florece en Cataluña la poesía de los trovadores, que siguieron los modelos provenzales de Tolosa adoptando un ideal caballeresco, con originalidad, riqueza de géneros, belleza y artificio de formas así como musical armonía. El Valor moral estaba ausente en estos cantos, cuyas ideas eran limitadas y no se ajustaban a la realidad. En el siglo XIV las letras catalanas abarcaron diversas artes poéticas, tratados del gay saber: Leys d’amor, de Guillermo Molinier, 1356; Consistorio de la gaya ciencia, de Jaume March y Luis D’Aversó, 1387–96), con la protección de don Juan I y, posteriormente, de los reyes don Martín y don Fernando, el de Antequera.”

Toda la producción literaria de este autor fue realizada en Túnez. Su libro Tuhfat al-adib (1420) o abreviadamente Tuhfa (regalo) es una obra autobiográfica en la que Turmeda relata su conversión al Islam. Esta tuvo lugar, según él cuenta, antes de llegar a Túnez. Fue en Bolonia, cuando uno de sus profesores, el viejo sacerdote Nicolás Martel, le reveló que el paráclito cuya venida anunció Jesucristo, no es el Espíritu Santo, como afirma la Iglesia, sino el profeta Mahoma.

Página de La disputa del asno, edición de 1922.
Página de La disputa del asno, edición de 1922.

En 1398 escribe el Llibre de bons amonestaments, que en su mayor parte es una adaptación de un libro italiano, con algunos pasajes originales de él, como el conocido poema Elogio del dinero. Este libro, conocido popularmente como El Fra Anselm, es su obra más divulgada, y consiste en una recopilación de consejos morales escritos en versos de rima fácil.

La disputa de l’ase (La disputa del asno), escrita en 1417, es una fábula en la que se discute sobre la superioridad del hombre con respecto a los animales, en una asamblea en la que el asno -representante de estos- rebate las razones alegadas por Turmeda en nombre de la humanidad. En una de las pruebas se intercalan varios cuentos para demostrar que los frailes cometen los siete pecados capitales. Este libro es una traducción de la disputa de los animales contra el hombre contenida en la enciclopedia árabe de los Hermanos de la pureza (siglo X).

Es autor además de Cobles de la divisió del Regne de Mallorques (1398), Llibre de tres (1407) y unas Profecías (1407), basadas en observaciones astrológicas. Muchas de sus obras fueron prohibidas por la Inquisición. Además de los idiomas en los que escribió, catalán y árabe, parte de su obra ha sido traducida al castellano, inglés, francés, alemán, ruso y turco.

El rey aragonés Alfonso V, en 1423, le otorgó salvoconducto para que transitara libremente por sus tierras, con sus numerosas mujeres, hijos e hijas, sirvientes y escoltas, pero parece que Turmeda no aprovechó este privilegio. Tampoco aceptaría la oferta del papa Benedicto XIII de Aviñón, que estaba dispuesto a perdonarlo si regresaba a la fe cristiana. Estos ofrecimientos de tan altas personalidades hacen pensar que Anselm de Turmeda se había convertido en un personaje importante.

Tumba de Anselm de Turmeda, en Túnez. Foto: Ghabara, Wikipedia.
Tumba de Anselm de Turmeda, en Túnez. Foto: Ghabara, Wikipedia.

Tras su muerte, acontecida después de 1423, se rumoreó en el mundo cristiano que antes de morir había abandonado el Islam y abrazado de nuevo la fe de la Iglesia, y se produjo la paradoja de que durante algunos años fue igualmente venerado por los musulmanes y por los cristianos.