Excelente cómic de Jean-Luc Fromental y Jean-Claude Floc’h.

Encontré hace unos días este cómic en una oferta de álbumes descatalogados de Ediciones Glénat y ha sido una grata sorpresa, ya que se trata de una obra cuanto menos curiosa. Con guión de Jean-Luc Fromental y dibujos de Jean-Claude Floc’h, No hay dos sin tres es una historia de personajes de la clase alta, amorales, caprichosos y superficiales; un mundillo que no ha sido explotado habitualmente por el cómic.

La línea clara más clásica aplicada a contar la historia de un triángulo amoroso entre miembros de la alta sociedad, de exquisitos modales y refinado comportamiento, pero carentes de cualquier principio ético: una mujer a la que aburre la fidelidad, un marido rico sin más interés que guardar las apariencias y un joven piloto de carreras, amigo del marido y amante de la esposa.

Los tres conocen la verdad: Monty sabe que su esposa se acuesta con Don; ella sabe que su marido lo sabe y Don les sigue el juego a ambos. Todos fingen hipócritamente y actúan como si nada supieran. Esto no significa que acepten la situación, puesto que siempre andan tendiendo trampas al «enemigo», mintiendo y traicionándose entre ellos. Pero todo esto lo hacen marcando estilo y manteniendo la elegancia, que es lo único que les importa. «Unas normas de comportamiento y unas poses que parecen inspirados en los relatos del gran Scott Fitzgerald» como bien dice el texto de la contraportada.