Un clásico paisaje de China inscrito en la lista del Patrimonio Mundial.
El paisaje cultural del Lago del Oeste de la ciudad china de Hangzhou acaba de ser inscrito en la lista del Patrimonio Mundial de Unesco. Este paisaje comprende el Lago del Oeste (Xi Hu) y las tres colinas que lo rodean, en las que se alzan diversas construcciones de distintas épocas.
Pagoda LeiFeng. Foto: Augapfel.
Según el comité de Unesco:
“El paisaje inscrito ha inspirado a famosos poetas, intelectuales y artistas desde el siglo IX. Se compone de numerosos templos, pagodas, pabellones, jardines y bosques ornamentales, así como calzadas e islas artificiales. Estas obras se hicieron para mejorar el paisaje al oeste de la ciudad de Hangzhou, al sur del río Yangtze.
El Lago del Oeste ha influido en el diseño de jardines del resto de China, así como en Japón y Corea a lo largo de los siglos y aporta un testimonio excepcional de la tradición cultural de la mejora de los paisajes para crear una serie de escenarios que reflejan una fusión ideal entre los seres humanos y la naturaleza.”




Entre los edificios singulares del área están las pagodas de Liuhe, Baochu y Leifeng y los templos de Lingyin y Jingci.
Marco Polo pasó por Hangzhou a la que calificó como “la más espléndida ciudad celestial del mundo”.
La pagoda Lei Feng
El edificio más conocido de la zona es la pagoda Lei Feng. Se construyó en el año 975 por orden del rey Qian Hongchu para celebrar el nacimiento de un hijo de Huangfei, una de sus concubinas favoritas. Por esa razón se la llamó pagoda de Huangfei, aunque fue conocida también como pagoda del Oeste, por encontrarse en ese lado de la ciudad.
El edificio es de planta octogonal, con cinco plantas y supera los 71 m de altura. El cuerpo principal de la pagoda era originalmente de ladrillo y los aleros, balcones, balaustradas y paredes interiores, de madera. Incrustadas en la parte interior de los muros se encontraban unas piedras con inscripciones de las llamadas escrituras Huayan. Había también dieciséis esculturas de vajra arhats a los pies de la pagoda, pero se trasladaron al cercano templo Jingci.



A mediados del siglo XVI piratas japoneses quemaron la pagoda, que conservó sólo su estructura de ladrillos, aunque estos fueron robados durante siglos ya que se creía que tenían poderes curativos, hasta que en 1924 lo que quedaba del edificio colapsó.
En 2000 se construyó una pagoda similar a la original, pero con estructura de acero, aire acondicionado y escaleras mecánicas, que es la que hoy visitan los turistas. Durante las obras se descubrió un palacio o mausoleo enterrado debajo, que contenía valiosas piezas, incluyendo un gran número de monedas, un ataúd, dos espejos de bronce, un pedestal de estatua y una figura de Buda de bronce de 68 cm de altura.
El edificio actual cuenta con escaleras mecánicas. Foto: jrawle.
La pagoda desde el lago. Foto: johntrathome.
Liuhe, la pagoda de las seis armonías
Dentro del área del paisaje cultural del Lago del Oeste de Hangzhou que Unesco ha inscrito en la lista del Patrimonio Mundial, se encuentra la Pagoda de Liuhe o de las Seis Armonías. El nombre proviene de las seis ordenanzas budistas.
A diferencia de la pagoda Lei Feng, que está al borde del lago, Liuhe se encuentra a los pies de la colina Yuelun, frente al río Qiantang. Es una torre de planta octogonal y casi 60 metros de altura, que aparenta tener trece pisos en el exterior, pero interiormente cuenta en realidad con siete.


Fue construida originalmente en el año 970 dC, durante la dinastía Song del Norte, destruida en 1121 y reconstruida totalmente de madera y ladrillo en 1165, durante la dinastía Song del Sur. Los aleros exteriores se añadieron durante las dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911).
Hay una escalera que conduce a la planta superior y en cada uno de los siete techos hay figuras talladas y pinturas de animales, flores, pájaros y personajes. Se dice que la razón para la construcción de la pagoda fue calmar las crecidas del río Qiantang. Según el historiador Joseph Needham la torre es en realidad un faro que ayuda a la navegación por el río. Desde lo alto de la pagoda se divisa el puente metálico construido en 1930.
Foto: Bluntschli.
Vista del río y el puente desde lo alto de la pagoda. Foto: naokomc.