Sidney H. Sime

Ilustrador de antiguos misterios.

Sidney Herbert Sime nació en Manchester en 1865. Su familia, de origen escocés, no tenía recursos, de modo que desde muy joven empezó a trabajar en las minas de carbón de Yorkshire, donde pasó cinco años empujando vagonetas por los túneles. Los mineros tenían un folklore propio que incluía la existencia de duendes de diferentes tipos que deambulaban por los pozos y galerías. En los ratos libres, Sime se dedicaba a dibujar a los duendes y, viendo sus ilustraciones posteriores, cabe suponer que esta etapa de su vida influyó decisivamente en su obra.

Sidney Sime

Más tarde fue dependiente en una tienda de ropa, barbero y rotulista. Por fin, logró entrar en la Escuela de Arte de Liverpool, ganando varios premios durante su estancia allí. Al acabar los estudios se puso a trabajar de ilustrador de libros y revistas como Illustrated London News, Pall Mall Magazine, Graphic, Tatler, Strand, Pick-Me-Up y The Idler, ésta editada por Jerome K. Jerome. Hacia 1897 Sime se hizo editor de la revista Eureka y dos años más tarde, gracias a haber heredado de un tío abogado, se convirtió en dueño de The Idler, aunque la empresa tuvo escaso éxito. Mientras tanto, en 1898, Sime se había casado con Mary Susan Pickett, una pintora miniaturista.

Sidney Sime representaba escenas de fantasía pobladas por personajes oníricos en ambientes oscuros. A nadie puede extrañar que uno de sus admiradores fuese H.P. Lovecraft, que lo menciona en sus relatos Pickman Model y The Call of Cthulhu. Las técnicas que usaba para sus dibujos incluyen acuarela, carboncillo, ahumado y tinta china, que aplicaba con pincel, pluma, espátula o esponja. Entre los artistas que reconocía admirar se encontraban Goya, Piranesi, Hayden y su amigo Augustus John, así como los grabados japoneses de Hokusai e Hiroshige.

Sidney Sime

En 1904, Sime fue llamado por el aristócrata irlandés Lord Dunsany, para ilustrar su primer libro, The Gods of Pegana, finalmente publicado en 1905. Esto comenzó una asociación que duró el resto de su vida. Sime tuvo la suerte de encontrar a sus admiradores más entusiastas entre los nobles ricos y generalmente excéntricos.

Su situación económica era por aquella época excelente. Se trasladó con su esposa a Londres. En su biblioteca destacaban los libros de Poe, Heine, De Quincey y Meredith. Compró un telescopio para mirar las estrellas, un microscopio para estudiar la vida de los insectos y un juego de química con el que un día casi voló el techo de su estudio.

En 1909, Sidney Sime y Caley Robinson crearon los escenarios de la obra de Maeterlinck The Bluebird, bajo la dirección de Herbert Trench en el Theatre Royal, Haymarket.

Sidney Sime

En los años siguientes, Sime se dedicó sobre todo a la pintura al óleo, pero no tuvo mucho éxito. Celebró dos exposiciones y tras el fracaso de la segunda en 1927, se retiró del mundo. Se recluyó en su casa y siguió pintando y dibujando, pero no quiso dar a conocer su obra, creando a su alrededor una aureola de misterio.

Sidney Herbert Sime murió el 22 de mayo de 1941 y fue enterrado en el cementerio de St Mary’s, Worplesdon. El ilustrador Roger Dean, célebre autor de portadas de discos, es uno de los muchos que lo citan como una influencia.